Casi más que leerle cuentos, lo que le gusta a Martina es que le expliquemos historias de cuando Pilar y yo éramos pequeños. Hoy Pilar le ha estado contando anécdotas de la infancia. En un momento dado Pilar le ha dicho que mañana continuarían con más historias, y Martina le ha preguntado:
—¿No sabes ninguna historia de cómo tu culo se hizo gordo?
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