martes, marzo 29, 2016

Conversaciones con Martina (118)

Martina se ha hecho amiga en Sant Feliu de Guixols de un niño que pasea por la calle ataviado de una especie de chaleco antibalas con la leyenda «Policía» luciendo en letras grandes y blancas a la altura del pecho y encima de la visera de una gorra negra de la que va tocado. El chaleco cuenta con no menos de 150 bolsillos de los que cuelgan, entre otros objetos, dos walkie talkie, unas esposas y una pistola.
—Martina, ¿cómo haces amigos tan friquis? —le pregunta su madre.
Martina se la mira con cierta condescendencia y le responde:
—El papa también es friqui y es tu esposo.