martes, noviembre 08, 2011

Diario

Diario


8


El titular de El Periódico de Catalunya de ayer me llamó poderosamente la atención. En grandes letras, propias de una noticia de alcance nacional, cuando no mundial, daba cuenta del número de mascotas abandonadas que deambulan sin amo por Cataluña.


Así es. Mascotas. Animales. Bichos. Y digo yo, con la que está cayendo, ¿a quién coño le importa? Me pareció una frivolidad que destacaran en portada semejante circunstancia, como si la indigencia canina fuera comparable con una tragedia humana de gran magnitud. Ahora mismo, cualquiera que pasee por las calles de su ciudad se da cuenta de que hay más personas buscando en los contenedores que perros vagando en busca de un hueso que echarse al hocico. En Mataró, por ejemplo, yo ya conozco a algunos que a diario realizan en bicicleta la ruta de los contenedores y se introducen en ellos de cintura para arriba en busca de objetos que puedan tener algún valor.
Que a pocas horas de un importante debate entre Rajoy y Rubalcaba, con la dimisión de Papamdreu y la muy probable del fantoche Berlusconi, El Periódico haya decidido prestar atención a una probable crisis de naturaleza animal casi me lo tomaría como una ofensa si no fuera porque he decidido observarlo como un acto de desinencia o desafección periodística: Un medio de comunicación que está hasta la polla de que cada día el mundo esté al borde del abismo, y como nunca acaba de precipitarse a él, concentra su antención en una circunstancia de lo más irreverente.

No hay comentarios: