Cada vez que Martina se niega a dejar sus juguetes a otros niños, le decimos que hay que compartir. Para qué le hemos dicho nada. Ahora se ha aprendido el concepto compartir, y lo pone en práctica en su beneficio cada vez que tiene oportunidad.
Ayer, con su madre.
-Mama, ¿yo cuando me voy a casar?
-Cuando tengas novio.
-El papa será mi novio.
-Perdona guapa, pero el papa es mi novio.
-¡Hay que compartir!
2 comentarios:
vaya papuchi orgulloso estás hecho, arcadi. muy graciosa y lista tu hija por lo que se ve.
cuando pueda me leo un poco más de tu blog. ahora no estoy muy operativo a nivel de internet porque me he dejado el cargador en barcelona y está a punto de acabarseme la batería.
además, me parece que tendría que estar estudiando para el último examen. bueno, pues eso...cuando resuelva estos handicaps ya te digo algo más.
¡Qué ocurrente! =)
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