sábado, enero 06, 2007

Cabalgata de Reyes en Gerona


Estas dos fotografías pertenecen al año pasaso, y muestran los momentos previos al inicio de la cabalgata.
Por tercer año consecutivo Pilar y yo hemos visitado Gerona para ver la cabalgata de los Reyes Magos que organiza la ciudad, con diferencia la mejor a la que yo he tenido la oportunidad de asistir, lo cual, vaya por delante, es garantía de bien poco, pues no he sido nunca muy aficionada a ellas, ni siquiera de niño me entusiasmó el rito de perseguir los vehículos de los que por lo general se compone la rua real. Gritar con los brazos en alto e increpar por su poco tino a quienes arrojaban caramelos, o devolvérselos con saña y voluntad de descalabrar no ha sido cosa que me haya divertido nunca. En todo caso la de Gerona posee una estética que me recuerda a las mejores películas de romanos vistas en la infancia: la indumentaria que visten, desde el primero hasta el último (en especial el séquito del rey Baltasar, tocados con espectaculares turbantes de color naranja), ha sido diseñada cuidando el menor detalle y con gusto exquisito y, a juzgar por la tela empleada, sin reparar en gastos. No hay en esta cabalgata el menor rastro de atronadores tractores con el distintivo del comercio patrocinador y sí hermosos caballos percherones, en cuyo lomo se posa la enorme capa que porta el erguido jinete que lo monta. El primer año, incluso, hubo varios individuos, debidamente disfrazados y pertrechados de arcos y flechas que cargaban a su espalda, que descendieron haciendo rapel desde lo alto de las antiguas murallas de la ciudad. Cabe destacar un circunstancia que ya advertí el año pasado y éste se ha vuelto a repetir: el servicio de limpieza municipal de la ciudad está compuesto en gran número de inmigrantes negros (de los siete que pude contar ninguno era blanco), ese día situados estratégicamente a la cola de la cabalgata, recogiendo las boñigas que dejan a su paso los caballos, y resultaba una escena curiosa contemplarlos a ellos, legítimamente negros, y un poco más adelante la extensa comitiva que seguía con jolgorio al rey Baltasar, todos ellos, incluido su majestad, blancos de ojos claros con el rostro embadurnado de un negro ilegítimo.
Antes de regresar a Mataró, Pilar y yo solemos concluir la jornada tomando un café con leche en alguna de las muchas cafeterías dispuestas junto al Oñar, desde cuyas ventanas, ya de anochecido, se pueden contemplar unas hermosas vistas del río en penumbra y algún pato rezagado dejando tras de sí, en el agua, el rastro zigzagueante y efímero de su paso.


6 comentarios:

Anónimo dijo...

y yo me la perdí por limpiar el piso de Tarragona!! Bueno, el año que viene me apunto, a ver si Gerona sobrepasa a Barcelona, cabalgata a la que soy muy aficionada y que creo es la mejor que he visto, A mi esto de la cabalgata y la noche y la mañana de reyes me sigue dando la misma ilusión que cuando era pequeña y mama nos llevaba a los tres a entregar la carta, o al Corte Inglés, o a ver los pesebres. Y la mañana de reyes la vivo siempre con exaltación (excepto este año, que me ha traido un cero patatero...). Y recuerdo bien el día que descubrí quien eran los reyes, gracias a un plan magistral tuyo o de yolanda de hacer guardia hasta que los vieramos entrar. Y claro, lo que tiene esto de ser la hermana pequeña, es que la inocencia se pierde pronto, así que yo me agarro a mi estado de negación y continuo disfrutando de los reyes...

manoli

Anónimo dijo...

Hola! Para mi los Reyes es lo mejor de estas fiesta lo vivo intensamente,me cuesta hasta dormirme y ahora con mi victor mucho mas.Aunque este Año la cabalgata en Mataro ha pasado rapidisima casi pillo torticuli de girar el cuello tan rapido jaja.Bueno muchos besos y me encanta tu pagina siempre que puedo la leo.

Anónimo dijo...

Hola,
Leyendo tu post me pregunto que carajo hago yo yendo a ver la cabalgata de Mataró, cutre entre las cutres.. una pena... porque seremos tan poco exigentes??
Habrá que ir a ver la de gIrona.

Albert

Anónimo dijo...

Tal vez la de Mataró no sea la cabalgata más bonita que hayais visto, tal vez vaya siendo hora de renovar las carrozas, pero señores es la cabalgata de mi pueblo y le tengo mucho cariño además Baltasar y su comitiva son negros y de los que a mi me gustan, puro ébano.
Mi madre no era muy partidaria de llevarnos a ver la cabalgata, las grandes aglomeraciones de gente le agobian, pero cuando llegó Daniel las cosas cambiaron, tal vez se hacía mayor y pensó que estaría bien invertir en el más pequeño, así que yo empezé a ir a la cabalgata con asiduidad a partir de cierta edad. Patricia en cambio la vivió desde dentro, ella formó parte de la comitiva un par de años (como no, siempre lo ha tenido que probar todo). Al crecer Daniel la cabalgata desapareció de mi vida y si bien lo intenté años con Raúl, me parece que tan sólo conseguí arrastrarlo uno. El año que viene llega mi nueva oportunidad, o tal vez mi excusa perfecta, tendré un sobrino al que acompañar.

La sra Friki

Anónimo dijo...

La señora Friki podría intentar que Raúl la viva desde dentro, con la piel oscura que tiene podría pasar perfectamente por el rey negro.

Anónimo dijo...

el día de reyes, mi madre siempre lo vivió de una forma muy muy especial,(no lo entiendo muy bien la verdad porque la pobre con nueve que eramos y su poder adquisitivo nulo y cuando digo nulo era nulo)y a nosotros nospasa exactamente igual, no dorminos la noche de reyes, y yo incluso hago para mis hija un montaje que ni le mismísimo Balti vaya.Por cierto para el año que viene,si a alguien le sobra algúnniño lo alquilo para poder llevarlo a la cabalgata, pago bien. mis hijas de veinte y trece años por primera vez este año me han dicho que ya eran mayores y que se iban con sus amigas, os aviso pago bien