Martina utiliza como ordenador personal un paquete de toallitas, cuya tapa, al abrirla, parece la pantalla de un portátil. Mientras su madre la peina frente al espejo del lavabo ella enreda en el teclado imaginario mientras canta una canción.
-¡El gall i la gallina estaven al balcó¡ -entona a voz en cuello.
-Qué canción más chula -dice su madre.
-La voy a poner en Internet -responde ella.
3 comentarios:
Qué bonitoooo!!! =)
¨Flipo¨ con mi sobrina cada día.
Estás tardando en comprarle un Ipad! Por cierto, a Alba le encanta poner canciones infantiles en el ordenador y enseñarselas al Adriá.
Jose
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